Peritajes & Peritos

Cuando en estos días está tan de actualidad las noticias del robo y la divulgación de las intimidades de los famosos, me parece idóneo recordar que esto nos puede pasar a cualquiera de nosotros sin necesidad de que nadie nos robe las claves ni que se infiltre en nuestro ordenado, simplemente ocurre por pequeños descuidos u olvidos nuestros.

Este es el caso que le ocurrió a Delia y que comento en este post al cual he llegado a tener conocimiento por medio de la sentencia SAP C 429/2014 de la Audiencia Provincial de la Coruña de fecha 26 de junio. Es una sentencia entretenida y me llamó la atención por la cantidad de personas involucradas en la misma, puesto que aparecen 29 acusados con nombres propios, pero se da a entender en la sentencia que aún intervinieron más personas anónimas.

El acontecer de los hechos por su propio fluir provocó un Sexting no autorizado de filmaciones íntimas de fuerte contenido sexual. Los delitos que se le imputan a los acusados son los de descubrimiento y revelación de secretos recogidos en los supuestos del art. 197 CP.

El caso de Delia lo provocó algo muy común y cotidiano, un simple descuido, un olvido.  Un buen día dentro del contexto de su privacidad e intimidad, Delia se realizó cuatro filmaciones en ficheros AVI, de tan sólo unos cuantos segundos de duración. En dichas filmaciones se estaba autosatisfaciendo y se le apreciaba el rostro.

Los ficheros los pasó a su PC y más tarde, cuando acabo con ellos, los borró pasando estos ficheros a la Papelera de Reciclaje, donde permanecieron sin ser borrados sine die.

Un buen día, el PC se averió y lo llevó a reparar a una tienda de su localidad especialista en estas labores y donde un técnico a la hora de realizar su trabajo se percató de la existencia de los ficheros y, a partir de este punto, se produjo la visualización, copia y distribución de los ficheros de video, evidentemente, sin la autorización de su autora y protagonista Delia.

Es curioso leer los caminos de distribución y como se extiende las ramificaciones pasando por la Piscina Municipal, llegando a Protección Civil y los Bomberos, visualizándose tanto en una bodega como en una gestoría, es tal el recorrido de los videos que me he permitido realizar un esquema con el nombre de los intervinientes para que nadie se pierda en el trayecto.

Esta es una muestra más de como puede llegar a extenderse aquello que se escapa de nuestro control personal. Cada cual es libre de hacer lo que desee en su propia intimidad, nadie tiene derecho a violarla y las consecuencia para la vida personal y social de la victima pueden ser catastróficas llegando a producir aislamiento, ansiedad, depresión y trastornos psicológicos en las víctimas. 

Aquí os dejo el enlace a la sentencia y un esquema en la foto adjunta para que podáis entreteneros con su lectura sin perderos por el camino.   SAP_C_429/2014


Por Rafael López Rivera, Vicepresidente de la ACPJT y de APTAN, socio fundador de ANCITE y owner de PERITOIT