Debido a las nuevas tecnologías, los cambios en todas las profesiones van a ser cada vez más numerosos y se van a propiciar cada vez más rápido. De ahí que sea fundamental cómo cada uno se enfrenta a lo diferente y lo desconocido. De la actitud que adoptemos individualmente frente a lo nuevo dependerá la dirección en la que evolucionemos como peritos calígrafos, documentólogos.
Por más que algunos aún se resistan, el sistema está inmerso en un gigantesco proceso de metamorfosis cultural. Y las circunstancias actuales son la crisálida que necesitamos para que los peritos calígrafos sigamos creciendo, madurando y nos acerquemos a las nuevas tecnologías y softwares especializados en pericia caligráfica y documentoscopia.
¿Cómo es posible que, a estas alturas, muchos no entiendan, todavía, los beneficios de la tecnología en nuestro oficio? ¿Cómo es posible que, en lugar de profundizar en los mismos, se siga escudando una parte más que sustancial de la profesión en el cómodo y fácil expediente de tirar del miedo al progreso tecnológico, resultado que, así, aún se pretenden, inútilmente, ampararse en la socorrida y fácil excusa de, ante la continua innovación tecnológica, tachar a las numerosas aplicaciones de ésta última de inútiles e, incluso, perjudiciales para nuestro ámbito de actuación profesional? ¿ Por qué todavía una gran parte de los profesionales de la pericia caligráfica se niega a asumir el reto de un continuo devenir de progreso tecnológico de aplicaciones para dicha disciplina científica, dándole, de tan lamentable manera, la espalda a la realidad de las exigencias que nos plantea la moderna sociedad del conocimiento, buscando un inexistente y, por tanto, falso refugio bajo el techo del miedo y de la ignorancia, que, lejos de dar cobijo a los que bajo aquél se sitúan, termina derruyéndose sobre los mismos convirtiéndolos en sus víctimas propiciatorias?.
Llegado ya es el momento de salir del estado de confort en el que tan cómodamente se encuentra instalada, por desgracia, gran parte de la profesión y, de esta manera. empezar la aventura de, en la búsqueda de la ampliación permanente de nuestros saberes, pasar a explorar las infinitas e inexploradas posibilidades que nos aportan las nuevas tecnologías para dotar a las periciales caligráficas de una profundidad científica digna y, en consecuencia, al nivel de las exigencias tecnológicas de nuestros días.
Los nuevos softwares tecnológicos no sustituyen la experiencia del perito sino que, muy por el contrario, suponen un eficaz instrumento auxiliar al servicio de la misma, a la que, de esta manera, se aporta mayor seguridad, generándose, de manera, una superior confianza en la labor pericial, a la que, de esta manera, con las novedosas implementaciones prácticas de los más recientes avances científicos, se ayuda, de manera decisiva, a hacerla mucho más objetiva y rigurosa.
Siempre cabe esperar encontrarse con luditas, personas que no conocen la tecnología, y con detractores cuya reacción instintiva es oponerse a cualquier novedad. Siempre hay personas que se encuentran acomodadas, pegadas tal cual lapas, a la falsa seguridad de su rutina, y que, simple y llanamente, se niegan, de manera terminante, a afrontar la labor, siempre compleja, pero, precisamente por ello, apasionante, de adentrarse en el camino del cambio, bajo la fácil excusa de que "siempre he trabajado así y mis peritajes son los mejores, por lo que los demás peritos están equivocados”, de tal manera que, sin tan siquiera conocer el funcionamiento de un nuevo software para pericia caligráfica, pasan a tacharlo, de manera tristemente irreflexiva y reactiva, de “milonga”.
No se debe cerrar la puerta - es más, finalmente no se puede - al abanico de posibilidades de las nuevas herramientas, que, a todas luces, se abre en su infinitud… La negativa a plantearse la singladura hacia el objetivo de una continuada innovación tecnológica cargada de futuro sólo conduce a una lamentable y cada vez más profunda obsolescencia tecnológica.
Cada día, gracias al imparable y cada vez más rápido avance de la tecnología, se dan a conocer, cada día, nuevos y mejores proyectos para el beneficio y el progreso del ser humano.
Es cierto que todos podemos equivocarnos, y corregir nuestro rumbo a mitad de camino, y que no podemos evitar ciertos tropiezos, pero algunos sí pueden evitarse y es preparándose lo mejor posible, con todos los medios a nuestro alcance, no ya sólo para el futuro, sino incluso para un presente cada vez más exigente, como peritos calígrafos y documentólogos.
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